Ciudades que optimizan la sincronización de los semáforos — alargando fases amarillas o coordinando las luces para reducir la velocidad y el paso en rojo — están logrando intersecciones más seguras sin grandes costos ni rechazo. Señales con tiempo adecuado influyen en la conducta de los conductores y ayudan a calles más tranquilas y predecibles.

Ajustes en el tiempo de semáforos mejoran la seguridad vial y frenan conductas de riesgo
BLOOMBERG


